Rezando [Edward Cullen]

Hoy era domingo y me tocaba ir a misa,yo era muy catolica aunque era raro de decir siendo vampira,hoy me traje conmigo a Edward,nos sentamos en uno de los bancos de alante..

Había aceptado acompañar a Alice a la inglesia, aunque no me hacía mucha gracia estar allí, ya que si no tenía alma era algo ridiculo estar ahí ya que no había nada que salvar...

Vi la cara de Edward y le mire burlona
-Venga ponte a rezar
Dije riendome para mi.

mire a alice sin mucho entusiasmo...

-no ienso rezar por algo que no me va a pasar...-dije solo que para ella me escuchara

-Ya,pero has venido a acompañarme y tienes que rezar y aparte ya te he visto haciendolo
Dije en un susurro mientras rezaba y le miraba con una sonrisa burlona.

-alice no he rezado desde que soy lo que soy
dije sin expresión en la voz y deseando qur acabara aquello

-solo es un momento ,hazlo por mi
Dije con una sonrisa

Me cruce de brazos y no le conteste no me pensaba poner a rezar...

-Nos esta mirando todo el mundo ponte a rezar
Dije en un susurro

Me dijera lo que me dijera no pensaba rezar e ir en contra de loq ue mi mente pensaba...

-preocupate por ti...-dije simplemente

-Quee soso eres
Dije con una sonrisa burlona ,rezando

Miré de reojo a mi hermana, que se había puesto a rezar. Por fin me dejaba. Me parecía una verdadera ridiculez rezar en... nuestra situación. Que ella hiciera lo que le apeteciera, pero no tenía por qué obligarme a mí a hacer aquello. Dirigí una mirada algo turbada a la gente que estaba a unos metros de mí, que nos estaba mirando, y rápidamente apartaron la vista. Suspiré, algo cansado por aquella situación.

Estuve riendome un poco al ver a Edward que mal lo estaba pasando el pobre,en mientras que yo rezaba,le tenia que sacar ya de aqui
-vamos a la puerta anda
Dije con una sonrisa

-Está bien-la verdad esque me sentía bastante incómodo en aquel lugar.
Fui andando a un paso muy lento, incluso para un humano, a la par de Alice, hasta que llegamos a la puerta del edificio.
-No me vuelvas a hacer algo así-le murmuré para que sólo ella lo escuchara.

Cuando salimos me sente en las escaleras que habia a la entrada de la iglesia
-tampoco es para tanto
dije mirandole mal

-Tan solo deberías haberte limitado a no intentar obligarme.-le devolví la mirada fulminante, con un añadido de reproche-La próxima vez que me traigas, si es que lo consigues, no lo hagas.-Esperara que me hiciera caso, pero siendo la pícara Alice...